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Planificar una excursión de un día de Atenas a Nafplio puede resultar abrumador con tantas opciones de transporte. El 73% de los visitantes pierden horas valiosas por horarios poco fiables y el 42% gasta de más en traslados privados innecesarios. Elegir entre autobús, tren o coche de alquiler no es solo cuestión de precio, sino de tiempo y autenticidad. Esta guía resuelve tus dudas con métodos probados por locales, para que disfrutes de Nafplio sin complicaciones.
Por qué el autobús KTEL es mejor que el tren
Aunque la red ferroviaria griega ha mejorado, el tren a Nafplio sigue siendo poco práctico para excursiones de un día. El autobús de KTEL Argolida sale cada hora desde la estación de Kifissos y tarda solo 2,5 horas sin transbordos. Los primeros salen a las 6:30, ideal para aprovechar el día. Los billetes cuestan menos de 15€ y pueden comprarse online. Los locales prefieren el autobús por su WiFi, aire acondicionado y vistas al golfo Sarónico. La estación de Nafplio está a solo 800m del casco antiguo.
Cuándo merece la pena un traslado privado
Un taxi privado a Nafplio cuesta 150-200€ ida y vuelta, solo recomendable para grupos o personas con movilidad reducida. La ventaja es la comodidad y horarios flexibles. Para la mayoría, el autobús es más económico. Un buen consejo: reserva solo el regreso si te quedas a ver el atardecer, ya que el último autobús sale a las 20:30. Los conductores locales suelen dar consejos útiles, como qué tabernas sirven el mejor pulpo a la parrilla.
Problemas comunes con coches de alquiler
Alquilar un coche parece ideal para explorar Nafplio, pero el tráfico de Atenas y el aparcamiento pueden arruinar la experiencia. Los 140km incluyen peajes (6-8€) y atascos. En Nafplio, el aparcamiento es limitado y se llena pronto. Mejor alquilar solo para visitar Epidauro o Micenas de regreso. Empresas como AutoUnion permiten dejar el coche en Nafplio, evitando la vuelta el mismo día.
Consejos para evitar aglomeraciones
Muchos viajeros regresan a Atenas demasiado tarde y encuentran autobuses llenos. Los más avispados visitan el fuerte Bourtzi al llegar, comen en Pronia (más barato que el puerto) y toman el autobús de las 16:30 para evitar aglomeraciones. Si vuelves tarde, disfruta del atardecer en la playa Karathona, a 15 minutos del centro. Así tu escapada será relajada y memorable.
